En nuestra localidad, y con protocolos por Covid mediante, está a pleno el Pro Vida de Verano, con la participación de más de 60 niños. En el predio municipal, seis personas más otras dos encargadas del espacio Ayelén atienden las actividades, que el coordinador Mario Drago consideró “importantes, pero los chicos tienen un espacio para jugar, divertirse, meterse a la pileta y disfrutar el verano. Seguro que en estas condiciones por el coronavirus la mayoría no puede salir de vacaciones y acá tiene este espacio”, indicó en una entrevista con La Arena.
El trabajo en burbujas “ha sido más difícil de coordinar, pero lo hemos logrado”, apuntó y lamentó que por las restricciones no se pueda acceder a los viajes de campamento y a Pehuencó, como es costumbre. Los chicos reciben desayuno al llegar y se van luego de comer un refrigerio.
Una vez a la semana, la colonia incrementa su número con la participación de unos 14 chicos que llegan desde la zona rural comprendida entre Falucho y Adolfo Van Praet, un poco más al norte.